¿Tener un pterigión es peligroso?

Un estudio demuestra que el pterigión puede aumentar el riesgo de melanoma cutáneo

Un pterigión es un tumor visible en la superficie del ojo. Normalmente emerge como un crecimiento triangular de las partes blandas del canto del ojo, con una apariencia rosada y carnosa. Este crecimiento es la forma en que el cuerpo trata de proteger el ojo de condiciones intensas, como altos niveles de luz solar, polvo, arena o viento.

En general, los pterigiones no son peligrosos. Durante las primeras etapas del desarrollo del pterigión, la principal preocupación es la cosmética, ya que cambia la apariencia del ojo, pero no afecta a la vista. Los síntomas en las primeras etapas pueden incluir irritación, picazón o ardor. Generalmente se pueden tratar con colirios. Evite la exposición excesiva a la luz solar y al viento para reducir los estímulos que provocan su crecimiento. Un pequeño pterigión que ha dejado de crecer es relativamente inofensivo y puede no necesitar ningún tratamiento adicional. Sin embargo, la cirugía es una opción si le preocupa el aspecto estético de su ojo y se siente cohibido, lo que puede afectar a su confianza general e interacciones sociales.

En muchos casos, el pterigión puede continuar creciendo a través del ojo y bloquear directamente la vista o distorsionar la forma de la córnea y causar vista borrosa (astigmatismo). ine «/>Es importante destacar que los pterigiones no son cancerosos, sino que son tumores benignos, lo que significa que, si bien pueden crecer localmente (y posiblemente afectar a su vista), no se propagarán a otras partes de su cuerpo. Sin embargo, es importante que un oftalmólogo evalúe cualquier crecimiento en su ojo para descartar afecciones más graves, como un tumor conjuntival o del iris.

Pterigión: un indicador del melanoma cutáneo, muestra un nuevo estudio importante Y aunque los pterigiones no son cancerosos, nuevos hallazgos publicados por investigadores australianos, donde se observó a 23 625 personas que se sometieron a un tratamiento para pterigión, demostraron que aquellas personas que con pterigión tienen casi un 25 % más de probabilidades de desarrollar melanoma maligno, una forma peligrosa de cáncer de piel. El estudio aconseja: «Los proveedores de atención oftalmológica que atiendan a pacientes con pterigión en desarrollo deberían aconsejar a estos pacientes respecto a este aumento del riesgo y recomendar una revisión regular de la piel». Cuéntele a su médico de cabecera o dermatólogo si tiene (o ha tenido) un pterigión, asegúrese de proteger su piel contra la exposición al sol/UV (p. ej., con un protector solar, camisetas de manga larga, sombra) y revísese regularmente la piel.